La temporada 1996-1997 fue un disparate de principio a fin. Marcos Eguizábal había dejado al CD Logroñés en Primera División, “con las cuentas a cero”, según sus propias palabras, y la venta de derechos de televisión en el horizonte, pero los nuevos propietarios del club dilapidaron el gran capital que puso en sus manos. Esa sonrojante campaña acabó con el inevitable descenso y supuso el principio del fin.
Un gol de Pita en el último minuto le dio al CD Logroñés el ascenso a Segunda División en la temporada 1983-1984. Ocurrió el 27 de mayo de 1984 frente al CA Osasuna Promesas (2-1) en el último partido de la Liga. Nadie lo esperaba al inicio del campeonato, pero se consiguió porque “sobre el campo demostramos que éramos mejores que otros con más nombre y más dinero de por medio”, dijo el entrenador Delfín Álvarez.
José Luis Romero dejó muy alto el listón del CD Logroñés (7º clasificado), pero David Vidal estuvo a punto de superarlo la temporada 1990-1991. El equipo se codeó entre los grandes y llegó a ser el segundo de la clasificación durante las jornadas doce y trece. Lo nunca visto. A falta de diez partidos para finalizar la Liga, aún era el cuarto de la tabla, pero acabó desinflándose y terminó el décimo con 37 puntos y un negativo.