El 12 de octubre de 1988, el vicepresidente del CD Logroñés, Mateo Berrueta, presenció en Sevilla el partido que disputó España contra Argentina (1-1). A su término, bajó al vestuario para saludar a Ruggeri y le rogó que le pidiera la camiseta a Maradona, fallecido ayer a los 60 años. "Pibe, dale tu camiseta a mi amigo Mateo...", le dijo. "Vos no viste que estoy en bolas; la tiré en la cancha". Entonces Ruggeri le dio la suya.

Los exjugadores del CD Logroñés Ángel García ‘Caparrones’, de 35 años, y Cesáreo Zubillaga, de 30, ya retirados del fútbol, salieron en auxilio del Calahorra avanzada la temporada 1957-1958, junto a Miguel Royo, de 34, que aún estaba en activo, con el fin de salvarle del descenso a Regional. Ahí coincidieron con los también exblanquirrojos Cesáreo Remón y Emilio Álvarez, y entre todos consiguieron el objetivo.

El 24 de noviembre de 1982, tal día como hoy hace 38 años, el árbitro Lamo Espinosa amenazó con suspender el partido de Copa del Rey entre el CD Logroñés y el Osasuna (1-1) en el minuto 32 del segundo tiempo, por el botellazo que recibió un linier. A raíz de los incidentes, el Comité de Competición acordó clausurar Las Gaunas por un encuentro y el Logroñés tuvo que jugar en Arnedo el siguiente partido de Liga.