El 30 de mayo de 1983, la Magistratura de Trabajo declaró nulo el despido de Pedro María Uribarri como entrenador del CD Logroñés y, al no poder ser readmitido en su puesto por la contratación de Delfín Álvarez, condenó al club a pagarle el dinero que habría percibido de seguir trabajando: 1.025.000 pesetas (6.160,37 euros). El 14 de marzo, el presidente Cesáreo Remón le había destituido sin alegar causa alguna.

El 15 de mayo de 1994, el CD Logroñés necesitaba ganar en Oviedo para evitar la promoción y lograr la permanencia en Primera División. El partido enseguida se le puso cuesta arriba, porque Lopetegui encajó un gol y los blanquirrojos se fueron al descanso con un 1-0 en contra. Entonces Marcos Eguizábal llamó desde Madrid y pidió hablar con Salenko. “Dos goles, quiero dos goles”, le dijo. Y el ruso marcó dos goles.

El 1 de mayo de 1985, a iniciativa de Belaza, los veteranos del CD Logroñés jugaron un partido a beneficio de la Cocina Económica, en el que participó Amantegui. “Tenía 45 años”, me cuenta desde Pamplona, “y quería correr tras el balón, pero no estaba en forma. Casi al final de la primera parte, me iba a cambiar Galarraga y me rompí el tendón de Aquiles. Esa ha sido mi única lesión”. Hoy, cumple 80 años. ¡Felicidades!