Corría el mes de febrero de 1943 y, tras proclamarse campeón de grupo de la Primera Regional guipuzcoana, el CD Logroñés buscaba refuerzos para afrontar con garantías la fase de ascenso a Segunda División. El día 27, la prensa anunció el fichaje de ‘un buen interior, llamado Miguel Muñoz’, que luego sería una leyenda del Real Madrid como jugador y entrenador, así como un gran seleccionador nacional.
El CD Logroñés fue el primer equipo español con tres jugadores extranjeros porque, tras haber fichado previamente al mexicano Abuelo Cruz, Marcos Eguizábal presentó a Ruggeri y Alzamendi el 19 de agosto de 1988: el mismo día en que, por sorpresa, la asamblea de la Federación Española de Fútbol acordó ampliar el cupo para la temporada venidera y no para la 1989-90, tal y como estaba previsto.
El Logroñés ficha al 'Pichichi' de Tercera por casualidad
Mis primeros recuerdos del CD Logroñés se remontan a la temporada 1978-1979, con nuestro equipo recién ascendido a Segunda División B de la mano del entrenador Luis Aloy y con un fichaje de relumbrón: el delantero del Guernica Miguel Ángel Lotina, de 20 años, pelo rubio y buena planta (1,81 metros), que, siendo el máximo goleador de Tercera, con 22 tantos, paradójicamente, no estaba en la agenda del club.